El proyecto de reforma de una casa antigua en Alboraya, deshabitada hace ya tiempo es siempre un ejercicio muy
estimulante. Sin embargo, leer atentamente el lugar para volver a dar vida a esos espacios que acogerán nuevos habitantes, que tendrán nuevos modos de vivir.
Sin embargo, el arquitecto Nacho Carbó diseña fijandose en aquellos elementos que todavía susurran su potencial. Los patios, los revoltones, la estructura de madera de la cubierta de la antigua construcción y elimina aquellos elementos superpuestos.
Pero es una casa pensada para habitar, para escuchar música, para crear en sus talleres o para leer plácidamente. Contemplar el juego de luces y sombras que el recorrido de las horas del día va dibujando en sus muros…
Por último, introduciremos nuevos espacios y elementos que conecten y creen la nueva vivienda como una casa contemporánea, pero con memoria.
